Regresiones


TERAPIA DE VIDAS PASADAS



No vivimos una única vez. Vivimos infinitas vidas, una tras otra, transportando nuestro espíritu de cuerpo en cuerpo. Desde esta perspectiva, podemos afirmar que somos inmortales Mueren los cuerpos que nos pertenecieron. Vive el alma eternamente, transportándose a través del tiempo, recobrando forma en cada cuerpo nuevo.

La terapia de vidas pasadas funciona en dos niveles: en primer lugar se trata de un viaje al pasado, de un regreso. Y en segundo término, significa el viaje hacia el interior de nosotros mismos, porque el retorno a las vidas que vivimos no está en el tiempo ni en el espacio en el sentido convencional de éstos términos; está en nuestro interior, en el lugar donde se alojan todos nuestros secretos, sentimientos, recuerdos, olvidos y vidas (incluso el tiempo, el espacio y el universo todo).
El procedimiento por el cual es posible regresar a vidas anteriores se manifiesta mediante la hipnosis. Debemos considerar entonces a la terapia de vidas pasadas como el acto mental de retroceder, a través de la hipnosis, a una época anterior con el fin de recobrar recuerdos que pueden estar influyendo negativamente en la vida actual de una persona y que, en ocasiones, constituyen la fuente de sus síntomas, la causa de su malestar.
Toda hipnosis es en realidad, autohipnosis, por cuanto el paciente es partícipe protagónico de la experiencia que vive. Es decir, domina el proceso. El terapeuta por lo tanto,

es solo un guía, un acompañante que mostrará el camino. Pero a la hora de viajar, de andar por ese camino, el paciente lo hará solo, en un recorrido que, lejos de parecerle misterioso e inhóspito, le resultará conocido, ya que no se trata de un viaje a un lugar nuevo, sino de un viaje a un lugar que ya estuvo. No es un conocimiento; es un reconocimiento. Un reencuentro, una vuelta, un regreso, un volver a esa vida que fue suya y que de alguna manera le sigue perteneciendo.
La terapia de regresión demuestra que el tiempo, más allá de lo que nos enseñaron, no es una materia sucesiva, encadenada, progresiva, donde el suceso de hoy borra al de ayer. El tiempo es simultáneo; existe el ayer, el hoy y el mañana paralelamente, al mismo tiempo.
Hay personas que durante el estado de hipnotización, contemplan el pasado como si estuvieran mirando una película, tomando cierta distancia emotiva. Otras en cambio, participan de manera muy vívida e intensa, como si realmente estuvieran repitiendo aquel suceso histórico. Incluso existen pacientes que hasta pueden experimentar olores y ruidos. Se han encontrado casos en que durante la sesión el paciente se exprese en un idioma que creía desconocido,(xenoglosia), aquel que dominaba en la vida a la que ha regresado y que ahora reaparece en su mente. Es factible también que los pacientes regresen al instante mismo de su muerte, observan como el alma se desprende de sus cuerpos sin vida, como si fueran espectadores de su propia muerte, a veces ellos mismos sienten ese desprendimiento, vuelven a morir.

La impresión que tiene el paciente cuando sale del proceso hipnótico de regresión es como si despertaran de un sueño muy vívido. Pero el recuerdo del sueño casi siempre se evapora con el tiempo, se pierden detalles. El recuerdo del retorno a una vida previa, en cambio, permanece firme en cada uno de sus detalles.
Al abandonar el estado de hipnosis, la persona recuerda todo lo vivido durante la sesión, absolutamente todo lo experimentado, demostrando, de esta manera, que, pese a su viaje en el tiempo, nunca perdió la noción del hoy, el ahora y el aquí. Porque la hipnosis bien practicada es incapaz de borrar los conocimientos alojados en la conciencia del paciente. La hipnosis no ofrece peligros. Carece de riesgos. Ninguna persona permanece reclutada al estado hipnótico. Así como es fácil y rápido ingresar, es fácil y rápido salir de la hipnosis.

La terapia de vidas pasadas ha sabido comprobar la supervivencia del alma mas allá de la muerte física, entonces es posible afirmar que la inmortalidad existe. La muerte humana es una muerte física. Y no es definitiva. Existe un renacer.
Si aceptamos que somos inmortales, que los errores que cometemos en esta vida pueden ser subsanados en la siguiente, que el alma no sufre, que el cuerpo es solo un vehículo que transporta al espíritu, que con la muerte no se acaba todo, que la vida es mucho más bella y misteriosa que lo que nos contaron, que la humanidad está unida en esencia aunque nos movamos por el mundo de manera individual, y que lo que se acaba hoy vuelve a empezar mañana, le perdemos el miedo a la muerte.
La terapia de regresión no habla de muerte. Habla de vida. Pues de la vida venimos y hacia la vida vamos, indestructibles, inmortales, evolucionando, abriéndonos paso.


SANAR ESPIRITUALMENTE




Lo más importante de la terapia de regresión es comprender que gracias a este proceso estamos en condiciones de curar determinadas dolencias de una manera no convencional y altamente efectiva.
Así como la mente es capaz de ejercer una poderosa influencia sobre el cuerpo, provocando síntomas, enfermedades e incluso la muerte, la mente, también, está facultada para sanar.


¿De qué forma cura la terapia regresiva?



Una de las formas de curación tiene que ver con la voluntad, con querer sanarnos. El hecho de someternos a una terapia regresiva significa que tenemos el deseo de mejorar. Ese es el principio de toda curación.
La curación puede basarse en el simple acto de recordar y experimentar de nuevo un trauma inicial. El paciente se cura al comprender los factores que causaron la enfermedad. Traslada a un plano conciente un hecho traumático alojado en su inconsciente. Sólo con ese acto está en condiciones de eliminar los síntomas dañinos.
La mejoría de las dolencias se produce al comprender las reales causas de nuestros síntomas, nuestros miedos, nuestras debilidades, nuestros traumas y nuestras dependencias.. Cuando se ven, experimentan y se comprenden las razones fundamentales de una enfermedad, los síntomas desaparecen, se resuelven los problemas. Se arranca el mal desde la raíz y el dolor se desvanece.
Mediante la técnica de regresión, la persona revive hechos significativos del pasado cuya carga emocional todavía está activa, representando un peso que le impide moverse con libertad.
Revivir las experiencias, experimentar las emociones, rescatar los pensamientos de ciertas conductas permite desligar esa parte de nuestra energía atrapada en el pasado y, entonces, se nos presenta libre para que la podamos utilizar en función de nuestras necesidades.

No olvidemos que uno de los más importantes valores del conocimiento de vidas pasadas son las lecciones que has aprendido. La memoria de tu alma es tu verdadera sabiduría. Cómo has aprendido y qué has aprendido, parece ser más importante que los datos de quién, dónde y cuándo.
El progreso del alma hacia la armonía con el Universo es la vara para medir cómo vemos un tiempo de vida.
Entrar:
 
Nombre de usuario:
Contraseña:
Sí te gustó la página, dale Like! ;)
 
Lee tú horóscopo del día:
 
Horóscopo Gratuito
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis